Así lo dice Jousin Palafox

¡AY, AHÍ NO HAY CULTURA!

En la primaria se nos enseña a leer, pero nunca se nos enseña a hablar ni escribir… Siempre me he preocupado en defender el correcto uso de nuestro lenguaje y veo con tristeza que la única forma en que nuestros jóvenes practican sus dotes de redacción no es siquiera a la hora de hacer sus tareas pues para eso basta un Copy/Paste de la sagrada Wikipedia, sino que sus ejercicios literarios son a través de mensajes de texto o “coments” en redes sociales, donde el “que” se ha convertido en “k” y por lo tanto “K a100do?” significa “¿Qué haciendo?”; “a1nk” es “aunque”; “a2xaora”, quiere decir “Adiós por ahora” y el “a3bt” se traduce en “atrévete”.

         Las nuevas generaciones no entienden a la vieja guardia porque ni siquiera hablan o escriben el mismo idioma. Para los chavos, el “Ay”, el “Ahí” y el “Hay” son iguales. Y no reconocen entre estas palabras porque sencillamente no leen ningún texto que les permita descubrir la abismal diferencia. No me refiero a noticias científicas ni artículos de investigación sino al menos el periódico o ya muy fregados el instructivo del su iPod. ¡Nada, simplemente no leen! Y eso me aterra, pues muchos de ellos son preparatorianos o universitarios que ya presumen una credencial de elector en la cartera, que sólo les sirve para ir al antro de moda. Pero lo más lamentable es que los adultos, hermanos mayores, padres, maestros, comunicadores, estamos cruzados de brazos ante esta situación. No sólo es que no sepan escribir, sino que el hecho de no leer los convierte en presentes y futuras víctimas de los gobernantes abusivos a quienes les conviene tener subyugado a un pueblo de idiotas e ignorantes.

¿A caso no es para dar miedo el que toda una generación de muchachos cuya única fuente de información es el FaceBook y la televisión (en donde hacen propio el criterio de Niurka y la señorita Laura), tenga derecho al voto? Los egipcios con sus revueltas y manifestaciones han pasado de la crítica a la acción, mientras nosotros nos entrenemos haciendo chistes del “borrachito de Calderón”, pues hasta allí llega la cultura de nuestro pueblo. Yo le pregunto a los jóvenes: ¿Cuántos diputados federales y senadores tenemos, tiene Constitución Política Baja California, en qué distrito local electoral vives y quién es tu representante, cuáles son las funciones del Legislativo o cuáles son los deberes de un regidor, qué es un cabildo? Y si me responden correctamente al menos dos, me doy por bien servido. Pero seguramente en las elecciones de 2012 presumirán su dedo marcado con tinta indeleble para recibir descuento en la compra de una hamburguesa. Ahora, si les pregunto quién es el nuevo director técnico del América, el nombre de tres jugadores de las Chivas, ante qué equipo anotó su último gol el Chicharito o el nombre de 20 programas de televisión, seguramente acertarán a todas. Por eso, aunque muchos me critiquen, les pido amablemente a estos sectores de la población que nada conocen de política: ¡Por favor no salgan a votar! Pues la democracia es el poder del pueblo para elegir a sus representantes, pero lamentablemente la masa ignorante es la que termina eligiendo a ciegas el futuro de los demás.

Así que nuestra forma de escribir revela mucho de quiénes somos, qué vemos, cuánto leemos y por lo tanto, qué tan susceptibles somos de ser manipulados por las esferas de gobierno. Por eso atentamente suplico que le pidan a sus alumnos e hijos que escriban en un papel la frase: “¡Ay, ahí no hay cultura!” Y si el sujeto examinado no es capaz de hacerlo correctamente, entonces tienen una gran responsabilidad ante los ojos y un buen primer paso sería apagar la tele para abrir un libro.

Nota - HABER:Verbo. HÁBER:Para los judíos, título inferior al del rabí. A VER :Expresión "para observar". Aber/haver/aver: No existen.

Una vez terminada su lectura, apliquen (a quien más desconfianza le tengan) el examen solicitado al final. Gracias!

Jousin Palafox Silva, graduado de la Licenciatura en Derecho de la UABC, escritor, conductor de radio en Tijuana y Colaborador de la Punto Cero Magazine Mexicali.